Páginas

domingo, 3 de marzo de 2013

El desencanto

Las razones que agravan la crisis en Europa radican sobre todo en el desencanto social y democrático. La sociedad esta más que harta. En España la imagen que ofrecen lo políticos es lamentable, pero no hay que olvidar que ellos son parte de la ciudadanía. La falta de valores, y lo que es más grave, la falta absoluta de escrúpulos, se ha extendido por la sociedad como una plaga exterminadora, y nadie mueve un dedo para evitarlo.

Unos cuantos ejemplos para retratar la situación:

1) Hay un grupo de personas, perfectamente identificadas, que han ocupado puestos en los consejos de administración de algunas cajas de ahorros, y después de dejarlas en quiebra se han autoconcedido indemnizaciones millonarias, lo que es un enorme fraude. Ellos no eran accionistas de las cajas, ni propitarios por cualquier título, simplemente estaban alli de paso, colocados por amiguismo u otras razones de índole semejante. Los españoles tendremos que pagar mediante impuestos las ayudas a estas entidades, pero nadie reclama a los ladronzuelos. Tendrían que estar todos en la carcel, previo embargo de todos sus bienes. A algunos deberian de añadirle tambien unos cuantos mamporros de propina.

2) Existe, tambien, una relación de politicos que han ocupado altos cargos en el Gobierno del Estado, en  Autonomías o en Ayuntamientos, que tienen sobre sus espaldas gravísimas acusaciones de robo, malversación, y toda suerte de delitos económicos. Cuando va a ser el dia, que sean juzgados y condenados. Si la justicia no funciona habra que pensar en crear un grupo que se encargue en nombre de los ciudadanos en que se apliquen los ajustes de cuentas correspondientes a todos esos pájaros.

3) Hay profesionales, del deporte, de las finanzas, del espectáculo, de la artes, etc., que cobran por sus trabajos cantidades desmedidas, de forma tal que en un año ganan mas que mil personas en toda su vida. No tiene sentido, algo está mal planteado y debe dársele solución.

Hay multitud de situaciones totalmente injustas que habría que solucionar pero la sociedad y sus representantes, los politicos, miran hacia otro lado. Para eso no los necesitamos, ¡que se vayan a sus casas y nos dejen tranquilos! Al menos nos ahorraremos el enorme gaste que suponen.

Cuando uno piensa en estas cosas, siempre acaba malhumorado, asi que voy a terminar con unas gotas de humor con unas imágenes extraidas de la típica presentación que circula en la red y nos envian los amigos a través de email








¡Creo que por hoy ya es suficiente!.

No hay comentarios:

Publicar un comentario