La última quincena de febrero hemos viajado a Jávea adónde no volviamos desde el mes de noviembre. Hartos del largo invierno, muy frio y con lluvias persistentes, estábamos deseando marcharnos a la costa, y una vez terminadas las revisiones médicas oportunas nos pusimos en camino.
El día 13 salimos muy temprano de Majadahonda y a las 11:30 estábamos en Jávea. Carretera con poco tráfico, pero con nieblas y lluvia hasta Atalaya de Cañabate, y a partir de la presa de Contreras. al entrar en la provincia de Valencia pudimos ver el cielo azul y soleado por el que estamos siempre suspirando.
El resto de la mañana y parte de la tarde lo dedicamos a preparar el apartamento y a media tarde fuimos al Arenal pare ver el ambiente. Como todos los años, en febrero están cerrados la mitad de los locales, pero nuestros favoritos permanecian abiertos, entre ellos: Es Tapa Ti, El Geographic, Octopus, La Perla, Acqua, y otros, pero poco público y una tranquilidad absoluta. Desgraciadamente en este viaje no hemos podido visitar mi restaurante favorito, El Mezquida, que abrirá a primeros de marzo
Al día siguiente, viernes, venian Marta y Antonio con María, pues Marta y María nos iban a acompañar toda la semana siguiente.
Paseos por el Arenal y hacia el puerto, el viernes y el sábado. Ese mismo día fuimos a comer un arroz abanda con Marta y Antonio a La Perla, y por la noche hicimos de abuelos-canguros para que Marta y Antonio salieran a cenar y darse una vuelta.
El domingo 16 por la mañana fuimos todos a La Esquina por el Paseo Marítimo hasta la hora de comer, luego por la tarde Antonio regreso a Madrid en el AVE, con autobus previo a Valencia
El resto de la semana nos dedicamos a pasear con Marta y María (en su cochecito). Arenal, Avenida Augusta, Paseo Maritimo y la zona del puerto, con la sorpresa de que el lunes cerraron La Esquina por obras. Otro día fuimos caminando a Cala Blanca, aprovechando el sol y el cielo azul. La diferencia de temperaturas con Madrid y Majadahonda oscilaban entre 8 y 14 grados a lo largo del día, asi que realmente mereció la pena el cambio temporal de residencia.
El viernes 21 regresó Antonio para recoger a Marta y María, que estuvieron con nosotros hasta el domingo 23.
Unos días muy tranquilos, a pesar de que María requiere toda la atención. Los días que nos quedamos solos Ana y yo, echamos de menos a María a quién ya nos habiamos acostumbrado.
Adelantamos la vuelta al miercoles 26, porque los pronósticos del tiempo anunciaban lluvias en Jávea. Pero una vez vez cumplidas la visitas al odontólogo y cardiologo, y antés de la Semana Santa intentaremos volver uno cuantos días, ¡Si Dios quiere!
El día 13 salimos muy temprano de Majadahonda y a las 11:30 estábamos en Jávea. Carretera con poco tráfico, pero con nieblas y lluvia hasta Atalaya de Cañabate, y a partir de la presa de Contreras. al entrar en la provincia de Valencia pudimos ver el cielo azul y soleado por el que estamos siempre suspirando.
Cielo azul y soleado a nuestra llegada el día 13. Al fondo el Montgó
El resto de la mañana y parte de la tarde lo dedicamos a preparar el apartamento y a media tarde fuimos al Arenal pare ver el ambiente. Como todos los años, en febrero están cerrados la mitad de los locales, pero nuestros favoritos permanecian abiertos, entre ellos: Es Tapa Ti, El Geographic, Octopus, La Perla, Acqua, y otros, pero poco público y una tranquilidad absoluta. Desgraciadamente en este viaje no hemos podido visitar mi restaurante favorito, El Mezquida, que abrirá a primeros de marzo
Al día siguiente, viernes, venian Marta y Antonio con María, pues Marta y María nos iban a acompañar toda la semana siguiente.
El viernes 14, salimos a pasear en espera de la llegada de María, Marta y Antonio
El paseo del Arenal que ha sido bautizado con el nombre de Passeig Tenista David Ferrer
pues él es oriundo de Jávea, Al fondo el cabo de San Antonio
Terrazas, restaurantes y cafeterias en la zona sur del Arenal. Algo mas animado
Al atardecer llegaron. María venía dormida
Paseos por el Arenal y hacia el puerto, el viernes y el sábado. Ese mismo día fuimos a comer un arroz abanda con Marta y Antonio a La Perla, y por la noche hicimos de abuelos-canguros para que Marta y Antonio salieran a cenar y darse una vuelta.
María pasó buena noche y se despertó muy tranquila.
El sábado 15 cumplíó cuatro meses
Preparada para el paseo
El sabado 15 por la mañana disfrutando del dia en compañia de Chechu,
hermano de Antonio, y su novia Isabel, que residen en Denia
María con sus padres, disfrutando del buen tiempo.
Cuando bajamos a buscarlos para ir ir a comer estaban en la arena tomado el sol.
Marta con María
María con sus abuelos.
Haciendo tiempo hasta la hora de comer
En una mesa muy especial.
Antonio y Ana.
Marta conmigo
María y la abuela, terminada la comida
El domingo 16 por la mañana fuimos todos a La Esquina por el Paseo Marítimo hasta la hora de comer, luego por la tarde Antonio regreso a Madrid en el AVE, con autobus previo a Valencia
El domingo 26, paseando junto al Canal de la Fontana
Hora del aperitivo, en la terraza de La Esquina
Marta y Antonio
El lunes 17 refrescó bastante y salimos a caminar. Al final del Canal de la Fontana
En el paseo del Arenal
Por la tarde en El Geographic.
El martes 18, mejoró el tiempo y salimos de nuevo a caminar
Todos
Disfrutando de la nieta
María sonriente
Probándole un nuevo vestido
El miercoles 18 por la mañana me quedé en casa mientras paseaban,
por asuntos informaticos como el dichoso blog
Jueves 20, María ya se había acostumbrado a la casa.
Sonriendo feliz
Descansando en Cala Blanca, en un dia espléndido
Comimos en Acqua. Marta delante del Montgó
Marta y Antonio salieron a cenar el sábado y María se quedó con nosotros.
Preparando el viaje de vuelta
María requiere todo el portamaletas para ella sola
En su asiento reglamentario
Dormidita para el viaje.
Unos días muy tranquilos, a pesar de que María requiere toda la atención. Los días que nos quedamos solos Ana y yo, echamos de menos a María a quién ya nos habiamos acostumbrado.
El martes 25 fue nuestro último día. Al dia siguiente, muy temprano, volvimos a Majadahoda
Adelantamos la vuelta al miercoles 26, porque los pronósticos del tiempo anunciaban lluvias en Jávea. Pero una vez vez cumplidas la visitas al odontólogo y cardiologo, y antés de la Semana Santa intentaremos volver uno cuantos días, ¡Si Dios quiere!
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