Meandros y Poliedros: Xi Pan

Conozco la pintura de Xi Pan desde comienzos del nuevo siglo. Entonces estaba iniciando una colección de fotografías de cuadros, sin distinción de estilos, épocas, ni origen de los pintores. Todo obtenido en Internet. La colección, por su tamaño y calidad, ha llegado a ser bastante interesante. Estos días he encontrado noticias sobre ella, y me ha ha dado pie a escribir un post sobre su obra. Ni que decir tiene, que hay bastante material sobre la misma., sobre todo en Google

Hoy presento a esta artista joven nacida en Wenzhou, China. Xi Pan comenzó sus estudios en 1989 en la Academia Nacional de Bellas Artes en Hangzhou, al año siguiente se trasladó a la Academia de Bellas Artes de Moscú, donde obtuvo un Master en Bellas Artes.

Fotografía de Xi Pan obtenida de su página web oficial

La opinión mayoritaria entre los críticos de Arte es que su obra artística tiene una sublimación del desnudo, mostrando su lado más sensual en un estado casi onírico. Sus figuras, siempre femeninas, aparecen en posiciones relajadas, ajenas a la mirada del espectador, perdidas en su placer infinito, dejándose arrastrar a los límites del subconsciente. Cada mujer pintada responde a la obsesión de provocar un viaje a la entrada de ese mundo erótico, donde la fiebre, el deseo, la pasión arden. La imagen se liga con el deseo, con el calor del erotismo, donde a través de las formas y colores nos hace que la sangre llegue a un estado en ebullición y no de frialdad al contemplar la obra. Sensaciones de ambos lados: la del artista y la del espectador. En el medio se sitúa la imagen, con poder autónomo, expansivo o compresivo de su ser interior.

En mi opinión, sus cuadros son, verdaderamente, muy exóticos y modernos. También es notable su colorido, que me encanta.

Xi Pan practica un estilo de pintura occidental, siguiendo el camino abierto hace años por su compatriota Pan Yuliang y, con la opinión generalizada de la notable influencia de Modigliani, y también recuerda con sus trabajos a Matisse, Klimt y a Schiele, nos deleita con un erotismo fresco, delicioso y lleno de guiños a Oriente y a Occidente. No obstante, yo creo que no es muy fuerte la influencia de Egon Schiele. Es evidente que sus obras no tienen la morbosidad de Schiele, ni su tono pornográfico, ni su tremenda fuerza expresiva, pero sí su erotismo, aunque bastante suavizado.

Es interesante saber que para los chinos la imitación de una pintura tiene un sentido muy distinto que para los artistas occidentales. El arte chino tradicional hace gala de la imitación de los grandes maestros. Lo genial en ese mundo surge, al parecer, cuando junto a la imitación se muestra un detalle nuevo, que hace a la obra distinta a la de su predecesor.

Publicaré una docena de fotografías de sus cuadros, para que se pueda apreciar su estilo, realmente sorprendente.